La educación debe ser pública, y de calidad. Se debe garantizar que todos podamos acceder a ella, dando oportunidades de un futuro mejor a quienes menos tienen, siendo así fuente de progreso de nuestra sociedad. Pero parece ser que el Partido Popular se está encargando de acabar con esto. Los recortes en educación que impone el ejecutivo de Mariano Rajoy, están rebajando seriamente la capacidad docente en nuestros centros públicos de enseñanza. Estos recortes suponen pérdidas en materiales, necesarios para poder desenvolver el día a día en un centro docente con normalidad, la reducción de becas para material escolar y transporte para estudiantes, y lo peor de todo, el despido de profesorado, con su consecuente saturación de las aulas, donde cada vez hay más alumnos en las clases, y menos profesores.
La Comunidad de Madrid es una de las comunidades más afectadas por estos recortes. El gobierno popular, encabezado por Cristina Cifuentes, anunciaba que contratarían 500 nuevos profesores para la escuela pública de Madrid. Este hecho representa una buena noticia, pero hay que tener en cuenta que la educación pública ha perdido más de 3000 docentes desde 2009. Si a esto le sumamos los profesores que se jubilan este año, los 500 nuevos profesores no suplen los niveles de hace unos años.
En el ámbito universitario puede verse como la subida de tasas no sirve para paliar el deterioro de las universidades públicas, ya que el beneficio que supone esta subida no supera las pérdidas por la reducción de financiación pública. Pero esta subida de tasas si que sirve para cerrar las puertas de obtener estudios superiores a muchos jóvenes que no pueden permitirse pagar estas altísimas tasas.
Además, en nuestra comunidad, la educación pública esta siendo claramente desplazada en favor de la privada. Mientras el presupuesto comunitario destinado a la pública decrece año a año, las escuelas privadas no hacen más que ver aumentar sus ayudas con dinero público.
La educación es un derecho del pueblo y un deber del estado, y nunca un negocio, tal y como lo ve el PP. Los gobiernos de la Comunidad de Madrid y de España deberían preocuparse más de la educación de todos, la educación pública, la cuál ha sido uno de los principales motores de progreso social en nuestro país en las últimas décadas, siendo garante de democracia ya que, un pueblo culto, será un pueblo libre.